«Los sindicatos estamos en peligro de extinción»

por Equipo Editorial

ESPECIAL #TRABAJADORES . Tercera entrega.

Como parte de nuestra serie de entrevistas a dirigentes y dirigentes sindicales, para relevar la voz de las y los trabajadores en el marco de la conmemoración del 1 de mayo, conversamos con Priscilla Fernández Lassnibatt, presidenta del Sindicato Tottus Copiapó, Vallenar, La Serena mall y Tottus Los Carrera que representa a más de 200 trabajadores. Este Sindicato lideró una huelga de más de 80 días el 2021, que concluyó con varias ganadas para las y los trabajadores.

¿Qué diagnóstico puedes hacer de la realidad del mundo sindical en la actualidad?

Los sindicatos estamos en peligro de extinción. El mal manejo de los sindicatos es evidente, dirigentes, sin vocación social, poca confianza de los trabajadores en sus representantes y el miedo de muchos es quedar sin trabajo por ser parte de un sindicato.

¿Cómo evalúas el proceso de rearme parcial que tuvo el movimiento sindical en el período que va del 2005 con las movilizaciones de los subcontratistas, hasta las luchas de los portuarios previo a la revuelta?

Los sindicatos siempre buscamos una mayor participación en las negociaciones colectivas, buscamos influir en la definición de las condiciones laborales, porque realmente no existen las condiciones apropiadas, los trabajadores en Chile estamos totalmente desamparadas por el poder ejecutivo. Siempre se habla de leyes que tratan de equiparar la cancha, mejores condiciones laborales, pero se ha fracasado. Los subcontratistas en el 2005 lucharon fuertemente por mejoras salariales, por dejar de ser subcontratados y pasar a ser de planta. Pero como les decía, después de la fuerte lucha que se dio no consiguieron nada. La lucha de los portuarios fue un factor que influyó en una tensión social y culminó en la revuelta.

¿Cómo evalúas el papel que jugó el movimiento sindical durante la revuelta y los procesos constituyentes?

Yo puedo hablar de mi ciudad Copiapó, todos los sindicatos del riteil estábamos unidos luchando, todos presentes en las marchas y con una ilusión muy grande porque se hicieran cambios reales. Los Constituyentes trataron de hacer lo mejor posible, pero debemos reconocer que el chileno solo se queda con el titular, no profundiza más y el terrorismo cibernético que implantó la derecha tuvo sus frutos.

Priscilla Fernández Lassnibatt, presidenta del Sindicato Tottus Copiapó, en conferencia de prensa en Santiago, acompañada del entonces diputado de Convergencia Social Gabriel Boric.

¿Crees que podemos hablar hoy de la existencia de un movimiento sindical en Chile?

No creo que exista un movimiento sindical en Chile, y eso es gracias al capitalismo y el individualismo arraigado en todos. Tampoco nos sentimos representados por la CUT, para que exista un cambio real se necesita hacer votaciones ciudadanas y que los pueblos manden.

Existen distintos referentes sindicales, centrales, confederaciones, etc., que no logran ser representativos para los sindicatos, ¿por qué crees que se da este fenómeno?

No nos sentimos representados ni por confederaciones, ni centrales, por su falta de transparencia. Como te indique anteriormente se necesitan encuestas ciudadanas, y no negociaciones a puertas cerradas.

En la misma línea que lo anterior, ¿cómo ves el desafío del mundo sindical frente a la realidad del trabajo precario que tiene obstáculos para organizarse y frente a la gran masa de trabajadoras y trabajadores no sindicalizados que no reconoce a los sindicatos como herramienta de lucha?

Como dije, los sindicatos estamos en peligro de extinción, la única manera que los trabajadores logren cambios reales y no sean esclavos del sistema patronal es con la negociación ramal. Con la negociación ramal existirán cambios reales y no habrá más precarización laboral.

¿Cuáles crees que son las perspectivas de acumulación de fuerzas para el mundo sindical? ¿Cuál debe ser el estilo de construcción que permita acumular fuerza sindical?

La unidad fortalecería a los sindicatos y esto sería con negociación Ramal. Seria una excelente coordinación que si Tottus se va a huelga todos lo hagan; Líder Unimarc, Jumbo etcétera.

¿Cómo evalúas la participación del mundo sindical frente a una agenda legislativa que ha estado movida el último año en temas laborales (40 horas, le Karin, ley de conciliación de la vida laboral y familiar, negociación ramal, reforma a las AFP)?

Ley Karin: una ley que tiene vacíos interpretativos, que más afecta al trabajador que al empleador, el ejecutivo implementa leyes sin tener los recursos necesarios para hacer investigaciones apropiadas. Las 40 horas también es una ley que no se ha podido implementar correctamente, muchos empleadores dan la hora que corresponde como ellos quieren, sin llegar a acuerdo con los sindicatos o el trabajador, vida familiar nula. La negociación Ramal es lo que esperamos los buenos dirigentes, los que nos preocupa realmente el abuso constante que recibe el trabajador por el empleador. La reforma de las AFP es un robo constante hacia quienes trabajan toda su vida para recibir pensiones de hambre.

¿Cuáles son los principales focos de lucha en que debiera concentrarse el movimiento sindical en lo pronto?

Igualdad en una negociación colectiva, beneficios reales para los trabajadores. Yo puedo hablar específicamente de los supermercados; ya no contratan trabajadores de 44 horas, solo de 30 horas y de 20. Tienen turnos de muerte, falta de personal, la automatización está matando a los pocos trabajadores y no hay protección ante la ley. Por eso los cambios tienen que ser efectivos, unidad y lucha.

Cuéntanos sobre la experiencia de la huelga del año 2021

Nuestra huelga duro 84 días y 10 días de huelga de hambre, es una de las más grandes del riteil, fue en plena pandemia, fue una lucha constante. De lo que más orgullosa que estoy es de mis socios, unos luchadores ya no soportaban más abusos. La empresa no quería negociar y nos ofrecía aumentar el bono de colación y el de locomoción en $100 cada uno. Llegamos a Santiago para dar la lucha, buscamos apoyo y nos manifestamos afuera de las oficinas de los Solari.  Finalmente ganamos un bono de colación de $3500, de locomoción de $2100, bono de término de conflicto de $500.000   los días de huelga pagados en un mes, préstamos blandos, sala cuna, bono de escolaridad, bono por defunción, aguinaldo de navidad y en septiembre, una giftcard, aumento de sueldo de 2% más reajuste del IPC en abril y octubre y un aporte al sindicato de $2.800.000. Además, los demandamos por reemplazo en huelga y ganamos, por lo que cada trabajador recibió un año después $150.000. Fue un gran desgaste, pero ganamos harto.

Trabajadoras y trabajadores del Sindicato Tottus Copiapó se movilizan en el marco de la larga huelga de 2021,
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