ESPECIAL «El MC en Chile» Entrega 6 // Chago, educador popular y muralista: “El muralismo es trabajo colectivo, es esperanza de mejor vida, es encuentro, es protesta, lucha y es fiesta” [Archivo RT]

artículo publicado el 20/09/2021 en la Revista TejeR

por UM-T Unidades Muralistas TejeR

Chago tiene un largo recorrido en esto de organizarse. Nos conocimos el año 1999 en el Segundo Encuentro de Organizaciones Populares, ocasión en que desde la Población Santiago de Estación Central se comenzaban a gestar diversas iniciativas de articulación de organizaciones populares. Fue parte del Colectivo Pablo Vergara y de los Muralistas del mismo nombre. Ahora, es miembro de las Unidades Muralistas TejeR. A continuación, transcribimos parte de la entretenida conversación que tuvimos un sábado por la tarde en el Centro de Encuentro y Formación Pedro Mariqueo de la Población La Victoria.

Comencemos…cuéntanos de ti. Soy Chago y me vinculo al mundo del muralismo popular desde mi niñez en la década de los 80. El año 1990 forme junto a otros cumpas del LEA (Liceo Artístico Experimental) los Muralistas Chapa y con esa brigada trabajamos temáticas asociadas a la resistencia contra el modelo neoliberal y la democracia restringida y cartucha de la concerta.

Nuestra estética transitaba entre el comic y el muralismo de homenaje a las luchas revolucionarias de América Latina. Con la Chapa pintamos hasta el 1998 aprox. Luego fundamos Muralistas Neltume y finalmente por el 2002/2010 los Muralistas Acción Rebelde (MAR) cuyo trabajo muralista se acoplo a la Educación Popular.

Soy nacido y criado en la Población La Victoria, mi mamá (Alicia Cáceres) era una militante social de base, con un alto compromiso con la parroquia y su comunidad cristiana de base, además de ser militante de la Izquierda Cristiana de Chile.

A propósito de tus inicios en la pintura callejera. ¿Cuál fue el primer mural que pintaste? Mi primer mural fue a mediados de los 80 ayudando a las UMCT que pintaban la fechada del recién inaugurado Centro de Encuentro y Formación Pedro Mariqueo en la Población La Victoria. Mi rol como niño muralista era pintar fondos y recuerdo que para mí los y las militantes de izquierda representaban un modelo a seguir. ¡Ser un niño muralista para ese tiempo, en mi mente, era lo máximo!

y…¿Cómo aprendiste a pintar? En la calle. Estudie Artes visuales en el liceo, en el Liceo Experimental Artístico de Quinta Normal, el famoso LEA.

¿Qué es para ti el muralismo? El mural es una obra de arte visual que utiliza como soporte un muro que da al espacio público.

Esa definición es de manual…¿qué pasa con la expresión callejera? (risas). Veamos. El muralismo popular callejero en cambio es una expresión artística de demanda del pueblo. Es un grito plasmado en los muros de las casas de las familias que sufren las asimetrías del capital, que contiene una lectura de la realidad y que da cuenta de momentos determinados de la larga lucha por la emancipación que camina nuestra clase.

No comparto la idea de que un fresco o un grafiti sea sinónimo de muralismo. No basta con que el muro, este en el espacio público y sea el soporte de la obra. Un mural, en la clave “muralista” es mucho más que eso. El muralismo es trabajo colectivo, es esperanza de mejor vida, es muestra viva de la organización de las y los populares, es encuentro, es protesta, lucha y es fiesta.  

y la organización…¿Qué monos pinta? La organización al interior de colectividades muralistas, lleva división de tareas, asume roles, establece instancias formativas en torno a lo técnico (pintura, color, forma, etc.) y a lo político (contenido). La organización permite la experiencia liberadora en el ejercicio muralista, donde no se depende del “arte” de una persona, donde lo logístico (compara de materiales y acopio de mismo) recae en la colectividad y no en un “mecenas”. La composición de un mural debería, por tanto, ser parte de una creación colectiva donde la voz de todos es la que se pinta.

Vamos cerrando la conversa. En clave más política. Si alguien leyera esta entrevista y tuvieras la oportunidad de dejar un mensaje en clave mas política a las y los que vienen del pueblo… ¿qué les dirías?

“La calle la cruzo con zancos.
Los muros son para rayar.
Que nacimos para quemar.
El verde que crece en los bancos.
Que todos tenemos un árbol.
Habiendo de un punto penal.
Que todo portón es un arco.
Que el mundo se debe patear”.

Chinoy

Ese extracto de canción es a mi juicio, una bella imagen de la vida cotidiana de cualquier población, de cualquier barrio, de cualquier villa donde habitamos las y los populares. Nuestras vidas están marcadas por códigos, formas y colores que no están en el país de los negocios, no son parte de la narrativa de los progresismos acríticos al capitalismo. Ser un niño, niña o niñe popular, nos permite mirar lo que la mala clase no mira y nuestro sentido estético es distinto a lo que en los malls se valora.

Pintar un mural, desde la lógica del muralismo popular y callejero es una pichanga, es un juego colectivo, donde ponemos las reglas entre todos y todas y donde nos la jugamos para juagar y eso va más allá del resultado.